La planta de amapola es ampliamente conocida por ser la fuente de diferentes drogas, pero también destaca por sus usos medicinales y por la belleza de sus flores…
¿Cuál es la planta de amapola y para qué sirve?
Pertenecientes a la familia Papaveraceae, existen varias especies de amapola, como ser Papaver somniferum -amapola real / adormidera- y Papaver rhoeas -amapola silvestre-.
La amapola real, conocida en inglés como poppy, es una planta anual con múltiples usos en Europa y Asia, que se caracteriza por tener unas vistosas flores rojas brillantes, rosadas o blancas.
Desde hace mucho tiempo, esta especie de amapola se ha usado como medicina natural, para la producción de ciertas drogas, como alimento y para hacer aceite comestible.
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¿Qué droga se hace con amapolas?
Con ciertas partes de la planta de amapola, se producen la codeína, el opio, la heroína y la morfina, derivados medicinales que provienen de la vaina de semilla inmadura o de la cápsula de Papaver somniferum.
Las especies de amapolas que contienen opio son Papaver somniferum, Papaver paeoniflorum, Papaver setigerum y Papaver giganthemum.
¿Para qué sirve la amapola como planta medicinal?
Principalmente, la medicina tradicional de variados pueblos del mundo ha utilizado la planta de amapola como un poderoso analgésico.
Su uso para el alivio del dolor se debe a su contenido de morfina, un componente que actúa sobre las células nerviosas sensoriales del cerebro y bloquea las señales de dolor de otras partes del cuerpo.
Además, la codeína presente en la planta de amapola ayuda para calmar la tos y también presenta propiedades analgésicas.
La amapola, a su vez, contiene la papaverina, un compuesto utilizado como relajante muscular, especialmente contra las contracciones musculares, así como para el tratamiento de los espasmos estomacales intestinales y los espasmos respiratorios originados por los ataques de asma.
Asimismo, la amapola puede reducir la ansiedad.
Históricamente, la medicinal popular tribal en la India central ha utilizado la amapola contra el dolor, la tos, la dispepsia, trastornos gastrointestinales, hipo e insomnio. También como sedante, para curar infecciones y cicatrizaciones de heridas.
Curanderos de tribus de la India han empleado la planta de amapola para la diarrea y para el dolor articular.
Pero así como una planta puede generar acciones terapéuticas y ayudarnos a sanar, también puede provocarnos un mal. La amapola no es la excepción.
La amapola puede producir euforia, disminuir la respiración, calambres musculares y muerte por sobredosis. Cabe destacar que, debido a las sustancias contenidas en la planta, la amapola puede ser terriblemente adictiva.
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¿Qué efectos provoca el té de amapola?
El té de amapola provoca una gran euforia y un potente subidón, además de servir para ayudar a dormir, como analgésico, supresor de la tos y relajante suave.
Sin embargo, también puede generar efectos indeseables y peligrosos si la dosis es alta, como ser sedación abrumadora, náuseas, tensión corporal y muerte por sobredosis.
Asimismo, los alcaloides del opio contenidos en la planta se caracterizan por ser altamente adictivos.
Los principales alcaloides del opio en el té de amapola son la codeína, la morfina y la tebaína.
Si decides consumir té de amapola, ten en cuenta estas precauciones:
- Cuanto más amargo y fuerte sea el té, más potente será su efecto.
- No es posible saber la concentración exacta de morfina que tendrá la amapola, lo cual implica un alto riesgo.***
- No es posible saber cuántos opiáceos tendrá el té de amapolas.
- Es una infusión muy adictiva.
- Jamás mezclar el té de semilla de amapola con Xanax, Valium, diezepam, lorazepam, alprazolam y otras benzodiazepinas.
***De acuerdo con un estudio publicado en el Journal of Forensic Sciences (1996), el contenido de morfina de la planta de amapola puede variar hasta 125 veces -de 2 a 251 ug/g-. Su concentración depende de una variedad de factores, como ser el tipo de semillas, cómo se lavan, el tiempo de cosecha, etc.
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¿Cómo se hace el té de amapolas?
Piensa e infórmate mucho antes de consumir un té de amapolas, porque sus efectos podrían ser letales y su consumo es tremendamente adictivo.
El siguiente procedimiento fue compartido por un consumidor a la plataforma especializada Erowid.
Por lo general, para un consumidor novato se usan entre 1 y 3 vainas de amapola, que deben machacarse o triturarse en pedacitos finos con un martillo, hervirlas brevemente en 1 taza de agua y dejar enfriar 5-10 minutos.
Luego, se filtra con un colador de malla de alambre y se presiona la pulpa para sacar la mayor cantidad de agua posible. Beber muy despacio.
A menudo, se añade otro té para dar gusto -por ejemplo, té de regaliz-, ya que su sabor es asqueroso.
Fuentes:
‘Traditional Medicinal Uses of Afeem in Central India’ – American Chronicle