La menta piperita es una de esas plantas con múltiples propiedades según la medicina tradicional de variados pueblos del mundo, utilizada para calmar la indigestión, los cólicos intestinales o biliares, el dolor de cabeza, como antigripal, anticatarral, para la caída del pelo y más…
¿Qué es la menta piperita?
Nombre científico: Mentha piperita
Se trata de una hierba aromática de origen europeo, que consiste en un híbrido natural de Mentha aquatica L. (menta de agua) y M. spicata L. (menta verde).
También se la conoce como piperita, menta inglesa, monte yuyo, peppermint, entre otros nombres populares.
Propiedades de la menta piperita
Entre otros beneficios, la medicina popular le atribuye propiedades como digestiva, carminativa (que facilita la expulsión de gases del tubo digestivo), desinfectante del intestino, así como calmante y estimulante de la bilis.
La parte utilizada son las hojas frescas o secas, que se recolectan en verano cuando está por florecer y se secan a la sombra.
Uso interno
Para males del estómago, intestino e hígado
Por su efecto tranquilizante, la menta ayuda a calmar los nervios gástricos y los cólicos o malestares de estómago.
Consumidas en crudo o bajo la forma de infusión, la menta resulta muy refrescante. Desde tiempos remotos, se usa como un remedio natural para los calambres, dolores de vientre y las malas digestiones.
Se indica en casos de digestiones lentas, inflamaciones del hígado y de la vesícula biliar, así como para el mareo y los gases intestinales.
La menta piperita está incluida en varias farmacopeas. En la British Herbal Compendium se indican sus hojas para tratar las flatulencias, dispepsia, cólicos intestinales y trastornos biliares,
ESCOP (European Scientific Cooperative on Phytotherapy) indica su uso para el tratamiento de síntomas asociados a trastornos digestivos como la gastritis, dispepsia, flatulencia o enteritis (inflamación del intestino).
En Alemania, el té de hoja de menta también se indica para enfermedades gastrointestinales y de vesícula biliar.
Usada en infusión, la piperita se utiliza popularmente para el alivio de trastornos digestivos, gases, hinchazón, vómitos y náuseas, además de las migrañas y jaquecas relacionadas con la debilidad digestiva.
A su vez, el té caliente de menta favorece la sudoración y baja la fiebre.
Uso externo
Aplicada en fomentos, la menta piperita se usa contra los dolores reumáticos y las contusiones.
Externamente, se utiliza en diferentes males respiratorios como la bronquitis, catarros o sinusitis, como un remedio natural para despejar las mucosidades.
La menta piperita se aplica como relajante muscular para calmar dolores de cabeza (cefalea de tensión).
Las hojas frescas machacadas se aplican sobre articulaciones inflamadas por artritis o gota.
Otros usos populares de la piperita
- como desinfectante de heridas y para aliviar dolores de oídos y muelas.
- contra las picaduras de insectos
- dermatitis de diversos tipos.
- contra quemaduras, con una infusión de menta batida con igual cantidad de aceite de oliva, aplicada en compresas.
- quitar el mal aliento
- en infusiones para aliviar la menstruación dolorosa y para desencadenarla cuando se retrasa.
Usos del aceite esencial de menta piperita
Entre otros contituyentes, la menta contiene mentol, el compuesto que concede su fresco aroma y que concentra varias de sus preciadas cualidades.
Se utiliza, principalmente, por su efecto sobre la secreción de la bilis, indicándose en casos de enfermedades del hígado y de los riñones.
La British Herbal Compendium indica el aceite esencial de menta para el colon irritable, los espasmos digestivos, infecciones respiratorias e inflamaciones de la mucosa oral.
ESCOP, por su parte, lo indica para tratar la tos, colon irritable o resfriados.
Cabe señalar que en el último tiempo el aceite esencial de menta se utiliza bastante para el crecimiento del cabello, aplicando 1-2 gotas en la mano y mezclado con champú.
Los aceites esenciales son compuestos aromáticos, una forma concentrada de la planta, cuyas propiedades tienen mayor poder. Por ello, se debe tener cuidado para evitar reacciones alérgicas o efectos adversos.
De hecho, el mentol puro y la esencia pura de menta son tóxicos, no deben consumirse.
El aceite esencial no debe usarse en niños, ni durante el embarazo o la lactancia. Además, hay personas sensibles al mentol, que pueden sufrir irritabilidad, inquietud o asma.
Se sugiere sólo ingerir aceite esencial si se lo indica un fitoterapeuta o médico.
¿Cómo usar la menta piperita?
Infusión común
- Colocar un puñadito de hojas (o 2 cucharaditas) en una taza de té.
- Agregar una taza de agua casi hirviendo.
- Tapar y deja reposar 5-10 minutos.
- Colar.
- Beber luego de las comidas.
Esa infusión se utiliza para:
- vómitos (si es mucho, 1 cucharadita cada 5 minutos), náuseas o malestar general – 3 tazas al día.
- cólicos intestinales, como digestivo, para flatulencias o mal aliento – 1 taza.
En cataplasma
Aplicado en cataplasma, con las hojas de menta fresca machacadas, ayuda a calmar:
- dolor de muela (puestas con 1 algodón)
- dolor de cabeza (con un paño sobre la frente).
Por medio de inhalaciones
Colocar agua hirviendo sobre 2 cucharadas de hojas y una toalla sobre la cabeza (mantener cierta distancia para no «quemarse»), durante 2-3 veces por día, para:
- aliviar los resfriados y catarros.
Dosis indicadas en infusión por la Agencia Europea de Medicamentos
Niños de 4 a 11 años de edad:
- Té de hierbas: 1.0 a 1.5 g de la sustancia herbal o triturada en 150 ml de agua hirviendo como infusión de hierbas – 3 veces al día.
- Dosis diaria: 3-4.5 g
Adolescentes:
- Té de hierbas: 1.0 a 2.0 g de la sustancia herbal o triturada en 150 ml de agua hirviendo como infusión de hierbas – 3 veces al día.
- Dosis diaria: 3-6 g
Adultos, mayores:
- Té de hierbas: 1.5 a 3.0 g de la sustancia herbal o triturada
en 150 ml de agua hirviendo como infusión de hierbas – 3 veces al día - Dosis diaria: 4,5-9 g
Fuentes consultadas: